Prisioneros en los batallones disciplinarios de la posguerra
Antonio Chipirraz Dorado, natural de La Línea, soltero y de oficio electricista, era vecino de Ceuta cuando el 3 de agosto de 1936, con 18 años de edad, fue detenido y condenado por consejo de guerra (causa 1211/1936) a 20 años de reclusión en la Prisión-Fortaleza del Hacho y más tarde en la de García Adalve. Finalmente cumplió 4 años y 3 días por beneficiarse de indulto, pasando a régimen de libertad condicional provisional.
Sin embargo, este nuevo estatus no impidió que como la inmensa mayoría de excarcelados comprendidos entre las quintas de 1936 y 1941 fuera obligado a realizar el servicio militar con el régimen franquista, lo hubieran hecho o no con el gobierno republicano.
Así pues, en enero de 1942 ingresó en el campo de concentración Miguel de Unamuno (Madrid), y dado sus antecedentes, fue condenado a trabajos forzados en el Batallón Disciplinario de Soldados nº 94, pasando por las localidades de Cervera (Lérida) y Lezo (Gipuzkoa).
Se desconoce el posterior derrotero concentracionario de Antonio Chipirraz, puesto que su expediente personal se encuentra inconcluso.
Fuente: Archivo General Militar de Guadalajara. Batallones Disciplinarios de Soldados Trabajadores Penados. 2ª Agrupación. Caja 301590, expediente 1803.
